Por José Luis Ayala Ramirez

Twitter: @ayala1788

 

Son pocas las películas que marcan a toda una generación, que crean escuela, que son un parte aguas marcando un antes y después en la historia del cine. El 12 de mayo de 1994 se presentó en el Festival Internacional de Cannes un cineasta de nombre Quentin Tarantino, que ya con su anterior filme; Reservoir dogs, había dado una muestra de su potencial en la puesta en escena, el uso de la música y la violencia pero sobre todo por sus diálogos picantes y cotidianos.

Hace 20 años ese 12 de mayo el cine daría un cambio radical tanto en su fondo como en la forma, Cannes vio nacer a una película de culto, a un mito, un hit, considerada por muchos cinéfilos como la película más importante (que no mejor) de la década de los 90s, ese día Pulp Fiction llego a nuestras vidas.

¿Y qué es Pulp Fiction? Siendo sinceros la historia que nos cuenta no es nada del otro mundo, realmente la trama es muy sencilla, todo se desata cuando dos matones; Jules Winnfield y Vincent Vega, son enviados por su jefe Marcellus Wallace a recoger un maletín al departamento de unos rufianes. De este básico argumento Tarantino se las arregla para entregarnos tres historias unidas por el mismo hilo pero separadas en cuanto a su trama, donde el humor negro, la violencia, las consecuencias cotidianas, los accidentes son el pan de cada dia.

Por un lado tenemos a Vincent Vega (John Travolta) quien debe llevar a divertirse a la esposa de su jefe Mia Wallace (Uma Thurman) mientras poco a poco el coqueteo, el baile y las drogas se apoderan de ellos. Luego tenemos a Butch (Bruce Willis) un boxeador que debe huir de la ciudad luego de desobedecer una orden directa de Marcellus Wallace durante una pelea, sin embargo su escape se verá interferido por un reloj y algún otro obstáculo. Finalmente volvemos con Jules (Samuel L. Jackson), Vincent y el misterioso maletín, un encargo muy sencillo que se complica cuando Dios (según Jules) se interpone.

Es por principio de cuentas este rompimiento de estructura lo que hace de Pulp Fiction relevante, ya se habían contado anteriormente historias de forma no lineal comenzando con la invención del flashback de Orson Welles para su Citizen Kane o la técnica narrativa que empleo Akira Kurosawa para Rashomon, sin embargo era la primera vez que el atractivo de toda una película recaía casi en su totalidad en esta peculiar forma de contarla y es que a pesar de que esta estructura narrativa no está justificada desde un punto de vista cinematográfico, (como si lo está por poner un ejemplo la de Memento de Christopher Nolan) poco importa cuando este rompimiento va unido a la picardía que le imprime Tarantino a toda su película. A partir de aquí la influencia de esta cinta se vería reflejada una y otra vez en películas como Amores perros, 21 gramos, Snatch, Crash alto impacto o Babel, ente otras.

Los personajes son otra parte esencial no solo de Pulp Fiction sino de todo el mundo de Tarantino, de hecho el mismo ha declarado que al escribir un guion lo primero que crea son los personajes para luego situarlos en algún contexto, los más puristas seguramente estarían en contra de esta técnica, pero cuando en los resultados tienes personajes memorables como Vincent Vega, Jules, Mia Wallace, Butch, Marcellus, el Señor Lobo, Pumpkin o Honey Bunny, poco importa el proceso.

Por su parte el casting que junto Tarantino para esta cinta es realmente envidiable, donde destacan principalmente Samuel L. Jackson, Uma Thurman y Bruce Willis, los tres en quizá la mejor interpretación de sus respectivas carreras, sin dejar atrás a un eléctrico John Travolta o un graciosísimo Harvey Keitel. Cierran este gran elenco Tim Roth, Christopher Walken, Ving Rhames, Eric Stoltz e incluso el mismo director nos deleita con uno de sus acostumbrados cameos en pantalla.

Pulp Fiction regalas varios momentos memorables que han perdurados a través de los años, secuencias como el baile de Vincent y Mia, la inyección de adrenalina, la tortura a Marcellus, el pasaje bíblico de Jules o la entrada del señor Lobo son ya historia del cine, pocas películas recientes poseen tal cantidad de momentos clásicos que han sido imitados una y otra vez hasta el cansancio.

Otra de las grandes cualidades que posee Pulp Fiction es sin duda la utilización de su soundtrack, la forma tan magistral en como Tarantino une la imagen con la música es digna de toda alabanza posible, pocos en el orbe utilizan la banda sonora de una forma tan fresca y llena de vida como lo hace este señor, haciendo incluso de la música un personaje más. Algunas de las canciones que podemos escuchar son Misirlou de Dick Dale en los antológicos créditos iniciales, además de Jungle Boogie, Flowers on the wall o Bustin Surfboards.

Pero la historia de Pulp Fiction no termina cuando los créditos finales aparecen en pantalla, ya que uno de los grandes misterios del cine moderno queda navegando en la mente del espectador en busca de respuestas, ¿Qué contiene el maletín? La única pista que tenemos es la mirada de asombro por parte de Pumpkin (Tim Roth) cuando Jules le deja ver su interior casi al final del metraje, mientras algo parece brillar desde adentro. El mismo Tarantino nunca ha dado respuesta concreta acerca del contenido del maletín, aunque muchos afirman que se trata del mismo que aparece en Resevoir Dogs y que lo que contiene es el botín de diamantes que atracaron los protagonistas de aquella película. Otra teoría deduce que lo que se encuentra dentro es nada menos que el “alma” de Marcellus Wallace, pistas como el primer plano del personaje que nos muestra una venda en su nuca (según la Biblia el Diablo se lleva el alma de las personas extrayéndola de la parte superior de la cabeza) o que el la combinación para abrir el maletín es 6-6-6 son razones suficientes para al menos pensarlo. Esta es sin duda una de las teorías más “locas” que se han formulado sobre algún filme.

El Festival de Cannes de 1994 se rindió ante el talento de Tarantino otorgándole la Palma de Oro a la mejor película de la competición, meses después arraso con varias nominaciones a los premios Oscar de la Academia incluidas la de mejor película y director, ganando el de mejor guion original para Tarantino. El paso de los años le ha dado todavía más reconocimientos, siendo incluida en el Top 100 del American Film Institute como una de las películas más importantes de la historia del cine americano, en cuanto al voto masivo la gigantesca base de datos de Imdb la coloca como la quinta película mejor rankeada de la historia solo detrás de Sueños de fuga, las dos primeras partes de El Padrino y El caballero de la noche.

Pulp Fiction asi ha llegado a 20 años cumplidos, 20 años donde con todo el merecimiento se ha ganado el estatus de película de culto, 20 años donde ha creado una gran ola de fans que se rinden ante el estilo de un director que le daría al cine pop algunas de sus más grandes glorias, 20 años donde el tarantiniano ya es reconocido como una definición de la locura, el delirio, la picardía, el humor, la violencia dentro de un filme. Una cosa es segura, estos 20 años no serían lo mismo en el mundo del cine sin la entrada gloriosa de Pulp Fiction.

«Ezequiel, 25-17:

El camino del hombre recto está por todos lados rodeado por las injusticias de los egoístas y la tiranía de los hombres malos.
Bendito sea aquel pastor que, en nombre de la caridad y de la buena voluntad, saque a los débiles del Valle de la Oscuridad. Porque es el auténtico guardián de su hermano y el descubridor de los niños perdidos.
¡Y os aseguro que vendré a castigar con gran venganza y furiosa cólera a aquéllos que pretendan envenenar y destruir a mis hermanos! ¡Y tú sabrás que mi nombre es Yahvé, cuando caiga mi venganza sobre ti!