Por José Luis Ayala Ramirez

Twitter: @ayala1788

Esta semana con motivo del Festival Internacional de Cine de Guanajuato daremos un pequeño brinco en el tiempo en Cineastas, homenajeando a un director que tuvo un gran auge durante la década de los 60s y que además fungió como productor en cientos de filmes. Una personalidad dentro del cine de Serie B considerado por muchos además como el padre del cine independiente en Estados Unidos. Nos referimos por supuesto a Roger Corman.

Corman comenzó su carrera cinematográfica en los 50s, pero fue hasta los 60s cuando se estableció firmemente en la industria, siendo uno de los mayores representantes del cine de Serie B, un género que alberga por lo general películas de poco presupuesto sin ningún tipo de pretensiones o calidad visual, la mayoría de sus historias eran de terror, que sin embargo con el paso de los años varios de estos títulos fueron considerados como de culto.

Hay un nombre en la literatura que se relaciona inmediatamente con el de Corman, ese es Edgar Allan Poe, ya que el cineasta americano dirigió una serie de películas basadas en los relatos del escritor nacido en Boston, muchos de los cuales fueron protagonizados por un referente de este tipo de películas, el mítico Vincent Price. Corman entendía muy bien la literatura de Poe, retratando notablemente ese miedo que exponían los cuentos macabros del novelista, sobre todo un terror psicológico que llegaba directamente a la mente del espectador explotando algunas de las más grandes fobias del ser humano. Además de este trabajo psicológico, el director era capaz de crear grandes imágenes llenas de horror que impactaban de inmediato a los ojos, algo todavía más aplaudible si tomamos en cuenta que sus recursos visuales eran escasos.

A pesar de que no se trata de un gran director (nunca lo veremos nombrarle entre los más grandes), Corman se ha hecho de un muy buen puñado de fans gracias al estilo peculiar de sus filmes, muchas de sus películas son títulos clave dentro del muy limitado cine de Serie B, además que era un gran cazador de talento, dándole alguna de sus primeras oportunidades a actores de la talla de Jack Nicholson, Bruce Dern o Robert DeNiro.

Más que un cineasta hecho y derecho, el nombre de Roger Corman es importante para el cine en general más por su faceta de productor, es en este rubro de donde viene su leyenda y su influencia dentro del séptimo arte, calculándose hasta 300 películas en que las que participo en esta función. En reconocimiento por su carrera recibiría en el 2009 el Oscar Honorifico.

Este fin de semana el Festival Internacional de Cine de Guanajuato le rendirá homenaje a esta leyenda viviente del cine, a una de las personalidades más influyentes de este arte durante los 60s, a un descubridor nato de talento y pionero del cine independiente americano. En Alegato nos unimos al festejo dándole este espacio a Roger Corman en Cineastas.

3 películas para recomendar

El entierro prematuro. Probablemente la película más conseguida de Corman donde capta perfectamente las sensaciones psicológicas del relato de Poe para trasladar en pantalla el miedo a algo tan común como el entierro. Un trabajo de estudio de personaje eficaz hacia el protagonista Guy Carrell quien es interpretado de forma fantástica por Ray Milland. Cierra el filme un final sorpresivo que dejara boquiabierto al espectador.

El hombre con rayos X en los ojos. Influenciada directamente por La mosca de Kurt Neumann, se trata de una película que busca crear horror al espectador tanto a nivel visual como psicológico, esta vez retratando los efectos secundarios de un experimento que busca brindar un bien a la humanidad para terminar convirtiéndose en la perdición de su creador. Altamente recomendable.

El viaje. Atípica película para la época (estrenada en 1967), escrita por Jack Nicholson y protagonizada por Peter Fonda, se trata del primer filme de la historia que expone sobre el consumo del LSD y sus efectos, como su nombre bien lo dice, el viaje al que es introducido su consumidor y como la mente de alguna forma es liberada. No es un filme fácil, lo amaras o lo odiaras.