Por Laura Vega

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Es tiempo de dedicarle un texto en nuestra sección “en pocas palabras” al maestro del relato corto Edgar Allan Poe, y que mejor que con una de sus obras que refleja todas las características literarias del autor; “El corazón delator”, un cuento que para muchos es considerado un clásico de la literatura gótica, publicado por primera vez en el periódico literario The Pioneer en enero de 1843.

Escrito en primera persona narra la historia de un personaje anónimo obsesionado con el ojo enfermo de un anciano con el cual convive, hasta que dicha obsesión lo persigue y delata al mismo tiempo; con una estructura muy interesante el autor comienza con el final, y con una frase que sirve para enganchar desde el inicio, lo que sigue nos mantiene al filo de la tensión in crescendo, cada palabra está enfocada al avance de la historia, lo que hace de «El corazón delator» posiblemente el mejor reflejo de las teorías de su autor sobre lo que debe ser un relato perfecto a pesar de lo corto.

Para mí además de la maestría con que está narrada la historia, me fascina el argumento y del personaje principal, el protagónico se lo lleva totalmente su personalidad tan sistemática y trastornada, la insistencia del narrador por demostrar su cordura hace de este texto algo superior, a raíz de la explicación racional de una conducta irracional, no cabe duda que Poe aclara en un cuento como la conciencia puede ser nuestro peor enemigo y traicionarnos cuando menos lo esperamos, con un terror psicológico nos muestra la capacidad de la mente humana frente a lo imaginario y lo real.

Sin más “El corazón delator” es el clásico de un clásico, es decir, un relato popular de un autor cuya reputación se debe a sus relatos, que se sirve de la perfección y de la extensión justa para para transmitir un nerviosismo asfixiante, un relato que recrea la atmosfera de la psicosis como ninguno, un texto exquisito que inspiro no solo al mundo literario, también al cine y obras musicales por ejemplo un tema homónimo de Soda Stereo.

 

* Robert Louis Stevenson hace notar la «poco menos que inverosímil agudeza en el resbaladizo terreno entre la cordura y la demencia» que manifiestan éste y otros cuentos de Poe; «El corazón delator» es «una contribución importante a la psicología mórbida».

* Julio Cortázar ve en el relato el tema de Caín, expresado en la obra de Poe en tres grados: en «El demonio de la perversidad» en «William Wilson» y «El corazón delator”. Añade que el relato expresa muy bien las obsesiones sádicas de su autor.