Por: Erick Gálvez Ayala
Nadie sabe que sería del mundo hoy en día si no se hubiera derribado el muro de Berlin, del mismo modo no estamos seguros que sucedería si Elvis de verdad estuviera vivo, tampoco se sabe como sería la vida en Palestina sin esos infames de Israel. Es imposible suponer que puede acontecer después de algún momento cualquiera, no se puede adivinar que sería mejor o peor. El terrible terremoto de 1985 se llevó a un artista urbano que forjaba una carrera cimentada en el trabajo, en letras vivas, armonías simples con significado poético, a Rockdrigo González.
El mejor representante de lo que pasaba en las calles del Defectuoso como le llaman a esta gran urbe era sin duda Rockdrigo, evidentemente un músico del pueblo que nos dio un disco editado antes de su deceso y cuatro más póstumos. Aunque Tamaulipeco de nacimiento, pareció siempre estar ligado a la gran ciudad, arribó a ella en 1975 no se sabe exactamente que le orillo aunque su apuesta era ser un hedonista dedicado a la música, al rock, al folk, era solo un cuenta cuentos pero el mejor en ese sentido.
La importancia de su obra comienza con el movimiento COLECTIVO RUPESTRE, que formó para rolar por diversas ciudades, a lado principalmente de Jame López y Rafael Catana, lo que buscaban era expresar su punto de vista melódico, su estilo de hacer rock, Jaime López hizo una carrera notable mientras que Rafael Catana hizo algunos discos mas enfocados en la trova que no tuvieron un impacto tan relevante. HURBANISTORIAS fue el único trabajo que se publicó antes de la catástrofe, disco enfocado en el titulo, contar historias cotidianas pero no por eso banales, un modo distinto de componer se asomaba, la mezcla de José Alfredo Jimenes y Chava Flores le daba un sello peculiar, al igual que el maestro Jaime López, Rockdrigo entraría en una carrera de resistencia mas que de aplausos. Temas instrumentados como en los orígenes de Bob Dylan, armónica, letras, atmósferas sin eco, un disco de buen nivel compositivo aunque el sonido no es el mejor, marcó un momento en el que Gonzalez componía casi una canción por día. las joyas de este disco son: «Perro en el periférico», «Balada del asalariado», «Distante Instante», «Balas», «Estación del metro Balderas», «No tengo tiempo», casi una obra redonda. Después de la salida del disco debut se realizó el festival de canción rupestre en el que participó como uno de los máximos representantes junto a otros muchos músicos que dedicaban su vida a componer canciones.
En septiembre de 1985 se dio la triste noticia de que el cantautor Rockdrigo González fue víctima del terremoto, la tragedia también nos había privado de escucharle, un silencio de la comunidad cercana a el se apodero del underground, no solo era que el artista no estaría sino el ser humano, el amigo, ese ya no volvería. Las reacciones de sus amigos fueron de mucha incredulidad, al año siguiente se publica EL PROFETA DEL NOPAL, canciones que fueron juntadas con una buena respuesta de ventas, algunas canciones tenían el aroma a desolación como si se presintiera su destino. «Algo de suerte», Solares baldíos», «Tiempos híbridos» son buenos cortes del trabajo.
AVENTURAS EN EL DEFE se publico en 1989, temas de menor calidad sacadas de grabaciones caseras, tenía algunas piezas rescatables como «Dicen que la muerte» y «Gran silencio». NO ESTOY LOCO es lo ultimo que se dio a conocer de su arte, aquí hay mejores textos «Que hacer», «¿Porqué?», «Si un día despertara».
El mito de Rockdrigo se cuenta en las calles que fue su hábitat natural, se escribe con letras de asfalto, es parte de los rupestres «aquellos que gustan de la fantasía le mientan la madre a lo cotidiano, tocan como carpinteros venusinos y cantan como becerros en un examen de conservatorio» como el mismo escribió.
«Con Rockdrigo Gonzalez teníamos un rock mas complejo, critico e inteligente.» José Agustín.
