Por Erick Gálvez Ayala

 

Cuantas ocasiones habremos escuchado frases hechas como «Las drogas destruyen«, «Los excesos en algún momento te pasan factura«, o «Lo que mal empieza mal acaba«, seguramente muchas; sin embargo, con James Ostenberg Jr tenemos que borrarlas porque el último mohicano del rock and roll destrozó todo a su camino, incluyendo esas líneas conservadoras que proponen un modelo integro para ser recordado.  Hablamos del inventor del caos en el escenario, el que se cortaba en sus presentaciones, el que «parecía» un demente que escapo del psiquiátrico, el más extravagante frontman en el mundo, el intimidante, el último de una raza aparte (Bowie, Reed, Lemmy) el mejor conocido como IGGY POP.

Estar en este mundo por setenta años después de vivir en la calle, estar hospitalizado en un manicomio, haber consumido más drogas que alimentos y seguir siendo ese demonio en el escenario sólo habla de una cosa, actitud. Cuando uno imagina el rock como más que un género musical, es decir, lo contextualizas como un estilo de vida, debemos de pensar en el nacido en Detroit, Michigan. El recorrido de IGGY POP está dividido en varias etapas donde el principal conductor ha sido la música, con ella dejo de ser James para convertirse en un hombre admirado por sus presentaciones desafiantes, pero no solamente hablamos de IGGY el showman; el músico desarrollo la idea clara del punk, agresividad, más rebeldía, más guitarras potentes, tres acordes tocados a máximo volumen con fiereza.

Con THE STOOGES fue presentado en sociedad, desde luego que la crítica en ese momento no le ponía demasiada atención debido al fulgor de bandas clásicas, aunque con el de boca en boca empezaron a tener buena reputación. Editaron tres discos: THE STOOGES, FUN HOUSE y RAW POWER. Este último el verdaderamente indispensable que contenía las salvajes «Search And Destroy», «Gimme Danger» y la homónima «Raw Power». Unos años más tarde presentarían dos trabajos más «THE WEIRDNESS» y «READY TO DIE» donde si bien mantenían la fuerza de su estilo, acentuaban que segundas partes no fueron buenas, al menos no tanto.

En solitario POP ha compuesto diecisiete discos, algunos muy olvidables, quizá porque las producciones rozan lo común, además de ser francamente pretenciosos como: «INSTINCT», «ZOMBIE BIRDHOUSE», «PARTY» o «AMERICAN CAESAR»; sin embargo, enfocándonos en lo mejor del cantante conocido como LA IGUANA, aquí están los cinco mejores discos de su carrera de solista:

PRELIMINAIRES

Para muchos esto no es IGGY POP, en este disco escuchamos a un intérprete más contenido, no por eso es condescendiente, hay una evolución muy clara, la voz parece tratar de emular a Tom Waits, un imperdible en su discográfica, basado en un libro majestuoso como es: LA POSIBILIDAD DE UNA ISLA de Michel Houellebecq.

NEW VALUES

La década más punzante fue la de los setenta, este trabajo termina una época fascinante donde su rabia mezclada a un sonido áspero le dan un nombre aún más importante ya sin el respaldo al menos en producción del Duque blanco. Canciones como «I´M BORED«, «DON´T LOCK DOWN«, «CURIOSITY» y «BILLY IS A RUNAWAY» son dignas de cantarse una y otra vez.

THE IDIOT

Con el apoyo de DAVID BOWIE quien dicen rescato a IGGY para llevarlo a Berlín donde se editó este grandísimo álbum, no es que con este trabajo haya quedado claro el camino que seguiría; sin embargo, es una propuesta fresca que inyecta de vida al padrino del punk, vital para lo que posteriormente se conocería como música industrial e incluso para la música oscura. Una excelente producción y una presentación en sociedad del POP solista.

POST POP DEPRESSION

El último disco de la voz del caos, con una banda interesante, Josh Homme y Dean Fertitia de QUEENS OF THE STONE AGE y Matt Heiders de ARTIC MONKEYS el resultado no podía ser mejor, un disco de rock and roll contemporáneo, finamente llevado por una base rítmica sólida, los acordes en guitarras nos remiten a un repaso de su obra musical, desde Berlín hasta nuestros días. Sin duda, hay grandes composiciones como la rockera: «AMERICAN WALHALLA«, la tenebrosa «BREAK INTO MY HEART» o «PARAGUAY» que es tal vez la mejor canción desde hace mucho tiempo del buen IGGY.

LUST FOR LIFE

Cambien apoyado por el duque blanco LUST FOR LIFE es la muestra de un gran disco, el mejor categóricamente. El inicio es tal vez el mejor en la historia del rock con aquella instrumentación garage encabezada por Alomar, seguida por Sales, Gardiner y Bowie. Un LP que puede simplificar cual ha sido la aportación principal de este americano dentro de la subcultura, la fuerza que imprimen al ejecutar canciones como: «Some Weird Sin«, «The Passenger«, «Turn Blues«, «Success» o «Fall In Love With Me» son envidiables, de nueva cuenta el camino estaba lleno de retos después de una obra descomunal como esta.

Han pasado 48 años del debut discográfico de IGGY POP, historias hay demasiadas, verdades seguramente hay menos, la música le debe actitud, fuerza, estilo y atrevimiento. Estamos empezando tal vez la recta final de este personaje muy particular del rock, nos queda (a reserva de alguna sorpresa de otro disco) su facha de malviviente, esa melena dorada como su piel, sus pantalones de mezclilla ajustados, su forma de aventarse al público, una comunión con los fans que no muchos tienen, uno de esos hombres en peligro de extinción, aquel que encontró en el camino del exceso llegar al palacio de la sabiduría.

«Sólo hay una guerra que puede permitirse el ser humano, la guerra contra su extinción» – Isaac Asimov.