Errores de percepción

 

Por Carla de Pedro

 

 

Como creer que hace frío porque tu cuerpo se eriza frente a la vida.

 

Como arquear la espalda ante la caricia de unas manos invisibles.

 

Como creer que se habla, cuando se estaba callado; o que se escucha, cuando se era sordo.

 

Como intuir el murmullo de un río que no existe.

 

Errores de percepción.

 

Como creer que los fragmentos componen piezas enteras: unidades.

 

Como creer que hay fórmulas químicas

para deducir el alma,

para entender los aciertos y los errores.

 

Como creer que hay un método científico para entendernos.

 

Que habitamos los espacios, los tiempos, los lazos.

 

Que la gramática sirve para comunicarnos.

 

Que las preguntas tienen respuestas.

 

Errores de percepción.

 

Como creer que se es libre una mañana de domingo.

 

Que se es libre porque las puertas estaban abiertas.

 

Como creer en los colores y en los sabores y en las formas.

 

Como creer en lo que tocamos, en lo que olemos.

 

Creer en la piel, en los brazos, en los cabellos.

 

Creer en las risas, en los tonos de la voz, en los ecos.

 

Errores de percepción.

 

Como creer en algo en serio

y dar un salto hacia la incertidumbre

para no aterrizar en ningún lado,

para despedazarse contra el suelo

en pedacitos de certeza.

 

Como creer en la escencia de las cosas,

en las metafísicas presocraticas,

en los arquetipos.

 

Errores de percepción.

 

Como estar todo el tiempo encerrado en uno mismo,

como estar siempre trás el espejismo de lo real,

como estar buscando caminos y más caminos para poder acercarnos a algo,

a alguien.

 

Como rellenarse de planes,

de mapas,

de álbumes de recuerdos,

de recortes de lo que un día fuimos.

 

Como poner cubos y más cubos de juguete, intentando construirnos.

 

Errores de percepción.

 

Como cuando miras a los ojos de alguien y crees que te estaba mirando de vuelta.