Nuestra era digital, la era de la información y la transformación de la civilización en robots, es abordada de manera fascinante por Diego Casas (Puebla, 1992), con un lenguaje afable, valiente y seductor.

Nos logra llevar en Humanomaquina a un recorrido directo por la que puede considerarse una autobiografía con tintes tecnológicos, referencias de la evolución de las máquinas hiladas con la historia de nuestro personaje principal, el cuál se debate en aquella pregunta del captcha,  eres un robot??

Y es que la forma de abordar un tema tan actual con un gran toque de originalidad, es de reconocerse, un libro que no puede esperar a que le dejes, tienes que seguir para terminarlo, porque sabes que la batería en algún momento debe de acabarse.

Diego Casas nos remite a esas ideas vagas sobre la importancia de nuestra vida sin emociones, sin esa capacidad de convivir, sin esos momentos de conversar, sin esos estímulos externos e incluso esas muestras de cariño. Deja claro como la vida, además de la tecnología, nacen, van evolucionando, pero inevitablemente, perecen, porque siempre viene algo nuevo, una nueva vida, un nuevo teléfono o alguna laptop con la mayor vanguardia.

Es posible que nuestro autor quiera resaltar, que en un inicio la novedad de hacer poco para conectar con gente a miles de km,  era fabulosa, los aportes de las redes sociales son maravillosos, pero también reforzar, que con los años, la caducidad de nuestra vida nos debería impedir atarnos a la individualidad, al aislamiento, porque todos los humanos en algún momento también seremos desechables.

Inevitablemente seremos aquellos olvidados en nuestro deterioro, fugaces estelas que algún día fueron más brillantes, el final está escrito, las máquinas dominaran, cada vez que el humano se quiera apartar de su verdad, cuando no queramos nada del mundo real.

Así pues, si quieres leer una obra directa, bien escrita y que deje en tu mente muchas cosas por analizar, no dejes de acudir a Humanomaquina, por qué te aseguro, no saldrás decepcionado.