Por: Erick Gálvez Ayala
Nos perdimos hace unos meses su presentación en el mismo recinto, apenas en Noviembre Mikel Erentxun estuvo en la CDMX haciendo unas presentaciones como parte de su último (gran) disco SEPTIEMBRE. En esta ocasión no desecharíamos la oportunidad de ver por primera vez al músico radicado en San Sebastián, así que, aunque no muy a tiempo, compramos los boletos para acudir al recital
Es sábado 16 de marzo, la ciudad está desquiciada como acostumbra entre semana, hoy se debe a diversos eventos culturales y deportivos, vamos encaminados al lugar del concierto, no es un lugar que conozcamos por lo que incluso el estacionamiento es una incógnita para nosotros, la familia completa, conformada por dos bellas mujeres y yo vamos con emoción expectante. Hemos llegado pero no hay lugar de estacionamiento, no empieza nada bien, solucionado el problema del lugar para el auto, ya nos encontramos formados, existe venta de vinilos,  algunas ediciones especiales llaman mi atención, solo eso. Al llegar a la puerta, segundo problema, no pueden entrar menores de edad, error personal, no vi la restricción de la edad, pero, ¿que hacemos? Afortunadamente no somos los únicos. Nos comentan que van a revisarlo, no sin antes advertirnos que era casi imposible dado las restricciones del lugar, sin embargo, se logra y no conforme con eso en un lugar apartado con buena vista, hemos corrido con suerte, aunque aun hay más, la persona que nos ayuda a ingresar nos comenta qué tal vez los menores puedan tomarse foto en camerino con Mikel, y así sucede, tenemos otra prueba superada. De acuerdo, ahora ya estamos colocados, preparados con alguna bebida para sobrellevar el calor presente.
Se apagan las luces para comenzar el show, sale la banda que le acompaña, para que al final se presente el protagonista de la noche, aquel músico que tuvo fama hace más de 30 años, y hoy reposa su carrera en la construcción de canciones y discos llenos de alma, de corazón, tal vez autobiográficos, viviendo desde hace quizá una década, un momento lleno de gracia, editando mejores discos aunque sin el reconocimiento de la multitud como antes. Comienza con “Cicatrices”, esa canción del gran álbum EL HOMBRE SIN SOMBRA, para después recordarnos  el clásico de su banda anterior Duncan Dhu “A tientas” este es el primer momento en el que la gente presente, que ha llenado el lugar comienza a dar signos de emoción, a pesar de que han pasado muchos años de sus últimas canciones con la banda hay huellas que nunca se borran. La siguiente canción es “Círculos”, una pieza con la cual el público permanece expectante,  para continuar con “California”,  ese hit de 1999, en donde cantamos a todo pulmón ese coro tan positivo “hay poco que perder pero mucho que ganar, nos queda tanto por vivir…” una de tantas frases mágicas con las que Mikel nos ha iluminado. Para este momento ya estamos encarrilados, las bebidas junto a la música han hecho su efecto, no hay nadie indiferente en este recinto poco habitual para escuchar rock. La siguiente pieza es “Mañana” un tema pilar en su carrera, una oda al amor como tantas otras del músico. “Cartas de amor” fue sin duda una de las mejores ejecuciones de la banda, que merece una mención especial dado que muestran una elegancia inigualable, bien ensamblada y transmiten una gran energía. Este hit con música como de una persecución wéstern nos deja maravillados.
Al cantante se le ve contento, disfrutando del momento, ocupado en el presente, seguramente con la mente en el futuro, nunca ha superado a la nostalgia porque no tiene una competencia con ella.
El show nos eleva por varios caminos, del presente (que ya es pasado) podemos oír “Flores y café”, “Tren a Marte”, “Tu y yo”, “Es solo amor”. Recibimos una sorpresa con un tema de Pau Dones, “Agua”, con el cual se queda solo en el escenario Erentxun, para continuar con “Veneno”. Minutos después ocurre un breve momento en el que la guitarrista Marina Iniesta nos deleitó con una canción de su banda REPION, habrá que buscarla en las distintas plataformas musicales
También oímos clásicos de esa banda de la que nunca fui fan, tal vez no se la importancia que tuvieron, lo que se, es el impacto que ha tenido en mi el musico vasco, apenas era una niño cuando él junto a Diego Vasallo tenían aquella fama, en el recinto, sonaron: “Cien gaviotas”. “Esos ojos negros”, “Una calle en Paris”, Rozando la eternidad”, “Palabras sin nombre” y la casa azul”, momentos donde la euforia fue desatada. Otros de los hits que el cantante nos presentó fueron “A pleno sol”, además de “Quien se acuerda de ti”.
Hemos vivido de todo, pero sin duda, los momentos mas recordados serán los que dejan las clásicas: “Esta luz nunca se apagará”, con la cual nosotros nos apoderamos de la interpretación, aullando cual lobos por la noche, “Aun minuto de ti” fue muy esperada, el mayor tema compuesto por Mikel ha traspasado el charco, incluso una persona que no siga al músico, sabe perfectamente la letra de esta joya incluida en su álbum NAUFRAGIOS. Y sin duda, esta noche no podía terminar sin la canción digna de un altar; “En algún lugar”, aquella melodía de tonos optimistas con la cual deslumbraron por los ochentas, el público ya no tiene asiento, los móviles han tomado protagonismo y el fuego no se ha pagado, hasta que suena la última nota. Ahora si ha terminado, después de 2 encore, y casi dos horas de concierto, se oyen a los Bee gees y la banda se despide, no sin antes mostrar unos pasos de baile, con los cuales la gente se emociona, esto ha sido un vendaval.
Mikel ha entrado al camerino para no salir, aunque antes de ello ha prometido que estará en noviembre nuevamente en México, mismo lugar, seguramente distinto show. Nos ha pasado de todo, nos hemos enterado  que el lugar en el que nos sentaron era el lugar de su fotógrafo y su esposa, estuvimos en una zona vip, sin saberlo. Pero eso no ha sido lo mejor, lo mejor es que hemos visto a un músico con una carrera destacada, en plena forma, evadiendo la nostalgia y consolidando su actual camino, un sendero que no esta a las Luz de las farolas, sino que se encuentra en el lugar donde las letras y frases mágicas habitan, después de todo, las cosas caen del lado que se inclinan, y no tengo duda que caerán del lado del reconocimiento, ese que esperamos próximamente tenga en nuestro país, el lo merece, porque sigue disfrutando el oficio, de componer, grabar y tocar en vivo.
“Hay dunas negras ahogándose en el tiempo
Hay rosas blancas sobre la almohada
Flores y caféSudor en la cama
La noche se escapa
Por la ventana» Flores y café,  Mikel Erentxun, Septiembre. 2023.