Por José Luis Ayala Ramírez

Probablemente no existe un director más polémico en la historia del cine que el italiano Pier Paolo Pasolini, su filmografía esta llena de películas que causaron mucho revuelo durante su época, tanto por su contenido visual como por los temas que tocaba, siempre borndándolos de forma muy escandalosa. Pasolini es un biopic que busca retratar los últimos días de la vida del cineasta italiano, y que como este, intenta ser también polémica y escandalosa.

Se trata de un filme que desde el primer minuto (con imágenes de Saló, o los 120 días de Sodoma) intenta poner en manifiesto quien era Pasolini y cuales eran sus pensamientos, sin embargo esto se queda en un simple intento, por lo que el espectador debe tener como conocimiento previo algo de la vida y obra de del director para no perderse en la trama, ya que se habla mucho de sus ideales políticos, los temas que le provocaban descubrir a través del cine, la relación que tenia con sus amigos y su madre (con la que aun vivía), etc. Sin embargo la poca habilidad narrativa de Abel Ferrara impide que estas situaciones lleguen por completo, la historia se puede tornar ante esto aburrida y bastante pedante.

Pasolini se divide en 2 partes claramente, la parte realista y la parte ficticia, esta última desarrolla algunas historias que el director aspiraba a contar en sus películas, con temas como la búsqueda de Dios y el existencialismo, propuestas altamente interesante y radicales, que uno mientras las observa se queda con ganas de saber lo que el italiano hubiera hecho con semejantes tramas.

La parte realista ve su mejor momento en el desenlace, un largo climax sobre la última noche de Pasolini, abordando sus preferencias sexuales y la parte más oscura de su vida, las imágenes golpean fuerte acompañadas de una envolvente música de opera rematando estupendamente el filme, haciendo olvidar en cierto modo sus carencias alrededor de toda la primera hora la cual fue en resumen bastante olvidable e irritante.

Por su parte Willem Dafoe es la imagen perfecta a nivel físico de Pasolini, no se puede negar, sin embargo se trata de una actuación únicamente cumplidora, el guion no da momentos para que el actor pueda lucirse como uno esperaría.

Pasolini es un biopic que al final de torna interesante gracias a su muy efectivo final pero que con un guion mejor pulido y una mejor narración pudo convertirse en una película más redonda y aplaudible, al final todo se queda un mero intento, querer y no poder.