Reseña de “La cabeza de mi padre” de Alma Delia Murillo

 

Por Víctor Daniel López  < VDL >

Twitter @vicdanlop

 

 

La búsqueda de un padre resulta siendo la propia búsqueda de uno mismo. El regreso a la infancia, y desempolvar los recuerdos, aunque a veces ese acto arriesgado haga abrir heridas muy grandes. Desangrarse. Desnudarse. Quedar uno expuesto al pasado, a los fantasmas, la incertidumbre de un presente que no avanza y no se sabe si algún día volverá a descongelarse.

Alma Delia Murillo. No hay alter ego. No hay disfraz ni máscara. Su historia, su pasado, su propia búsqueda. La lucha interna y la valentía por arrojarlo todo, perseguir su sueño: la escritura. Esa infancia alejada de la comodidad, los barrios en donde una niña indefensa, y sin padre, no tuvo las oportunidades, ni el cariño, que muchas lo tienen; las calles inseguras sin aquella figura masculina que la protegiera. Noches de vecindades peligrosas, víctima de acoso y abuso en cada uno de los escenarios que fue pisando, deseo de un hogar cálido y la necesidad de sentirse segura, de no ahogarse ni romperse cada vez que mentía cuando le preguntaban por su padre. La vida de oficina que se manda a la mierda, y, como a mí una vez me dijo Alma: “hay que agarrárselos bien duro para aventarse como kamikaze”, aunque todo mundo vaya en tu contra y te tache de soñadora de sueños inalcanzables. Y ahora, henos aquí, con este libro que llega a cientos de librerías, contándonos una historia que, ya sea por parte de la ausencia del padre, o por la ausencia de sueños, la búsqueda del rostro de un padre, o la búsqueda del rostro de un sueño, nos sentimos acompañados, recibimos esperanza, nos tranquilizamos. La reconciliación es compartida, Alma nos tiene en común, y todos somos plural de su libro.

La cabeza de mi padre” es la novela íntima de Alma Delia Murillo, donde narra su travesía en búsqueda de aquel padre que los hubo abandonado a ella y a su familia desde que era pequeña. Un diario, ficción, mezcla de recuerdos y collage de imágenes que nos va presentando para sentir esa ausencia que dejó un hueco muy grande en su vida y corazón. La reconciliación, no con él, tal vez con ella misma. El entendimiento y el perdón. Más como un libro de reflexiones personales, Alma desnuda su alma para mostrarnos su lado frágil, capaz de quebrarse, pero imponiendo siempre, a cada página, su fortaleza para compartir su historia y pensamientos con los otros.